Concepto de destilación simple
La destilación simple o también llamada sencilla es aquella en la que un 
líquido contenido en un recipiente es separado de otros componentes aprovechando el punto de ebullición del o los líquidos. Cuando se encuentran sólidos, líquidos o gases disueltos en un líquido se suele utilizar la destilación simple (con sus restricciones) para separar estos componentes.
Definición de destilación simple
Una destilación simple es un proceso meramente físico en el que los distintos componentes de una mezcla o disolución líquida se separan de este. Para ello se utiliza el punto de fusión del líquido o de los distintos líquidos del sistema. Sin embargo, existen una serie de detalles que pueden impedir que se utilice una destilación simple y que se tenga que recurrir a métodos de separación mucho más sofisticados.
La destilación simple consiste en calentar un líquido hasta cierta temperatura, generalmente la temperatura de ebullición de alguno de los líquidos de interés para que pase a estado gaseoso. Cuando esto sucede, en teoría y en un caso ideal, el líquido se separará de los demás componentes y se hará fluir por un tubo o torre de condensación en el que el gas es enfriado nuevamente para obtener el líquido.
Limitaciones asociados a la destilación simple
Cuando se tiene una mezcla o disolución de líquidos cuyos puntos de ebullición se encuentran muy cercanos entre ellos (menos de 100 grados centígrados aproximadamente) puede darse el caso que ambos líquidos se evaporen hasta cierto punto. El resultado final si bien tendrá un mayor porcentaje del líquido de menor punto de ebullición, también logrará evaporar una parte del líquido de menor punto de ebullición formando lo que se conoce como azeótropos, que son líquidos contaminados por otro líquido de punto de ebullición similar. Así mismo, si los componentes en sí mismos son solubles el uno en el otro pueden “arrastrar” parte de los componentes, contaminando de nuevo la fracción de interés.